El formol tiene múltiples aplicaciones: en la fabricación de resinas de úrea-formaldehído; de fenol-formaldehído, en resinas para la industria textil, en la fabricación de productos químicos; como agente de control de los microorganismos, así como en la desinfección; como agente de fumigación de amplio espectro; en las industrias de espejos, papel, metalurgia; en fotografía, cuero, construcción, etc.